miércoles, 17 de diciembre de 2008

sofocando un cigarro


Un bello hombre a la orilla del mar de la plata, en tanto que le daba de comer a su nutria, me aseguro que “basta que alguna vez lo pensaran a él, para así ser un recuerdo”; es el mismo hombre que sofocando un cigarro con su zapato izquierdo, en otra ocasión me ha dicho ¿como amar sin no exigir algo a cambio?, ¿qué se yo?, “si solo me falta saber como sobrevivir al presente” respondería el poeta, y yo le secundo.

No hay comentarios: